martes, julio 2

Algunas Técnicas de Estudio


ALGUNAS TÉCNICAS DE ESTUDIO

CUANDO SE ESTUDIA EN CASA.

Algunos elementos a tener en cuenta mientras se estudia.
1.   Elabore un plan de estudios con una rutina creíble.
2.   Respete su propia rutina. Recuerde que “el hábito hace al monje”.
3.   Estudie en un lugar confortable y en silencio.
4.   Permita concentrarse en el estudio.
5.   Hágase con la bibliografía del curso.
6.   Estudie de libros. Los apuntes o fichas de clase o “conocidos” le servirán de guía, lo esencial son las “fuentes” del conocimiento.
7.   Pregúntese mientras estudia si comprende lo que está estudiando.
8.   ¿Si no entiende, se debe preguntar por qué no entiende?
9.   Busque diferentes estrategias para tener éxito en el estudio.
a.   ¿Está “ESTUDIANDO” seriamente?
b.   ¿Necesita estudiar de otra forma?
c.   ¿Tendría que ir más lento o más despacio?
d.   ¿Esquematiza, hace resúmenes o mapas conceptuales?
e.   ¿Necesita más tiempo para pensar lo que está estudiando?
f.    ¿Debe modificar su plan de estudios?
g.   ¿Estudia en un lugar confortable?
h.   ¿Necesita discutir lo estudiado con otros alumnos para procesar la información?
i.     ¿Necesita ayuda de algún otro profesor, bibliotecario o profesional de la materia?

Hábitos convenientes para un estudio exitoso.
Usted puede prepararse para tener éxito en sus estudios. Intente desarrollar y valorar los siguientes hábitos:
1.   Tome responsabilidad por sí mismo. La responsabilidad es el reconocimiento que, en orden al éxito, usted debe hacer decisiones acerca de sus prioridades, su tiempo, y sus recursos.
2.   Céntrese alrededor de sus valores y principios. No permita que amigos y conocidos dicten lo que usted considera importante.
3.   Elabore una lista de prioridades y respétela. No permita que otros, u otros intereses, lo distraigan de sus metas.
4.   Descubra momentos y lugares claves para su productividad. Mañana, tarde, anochecer, espacios de estudio dónde usted puede estar más concentrado y ser más productivo. Priorice estos para sus más difíciles desafíos de estudio.
5.   Considérese a usted mismo en una situación victoriosa. Usted gana haciendo y contribuyendo lo mejor que puede para una clase, para usted mismo, sus compañeros, e incluso para sus profesores. Si usted está satisfecho con su actuación, una calificación se vuelve una verificación externa sobre su actuación que puede no coincidir con su provecho interno.
6.   Primero comprenda a los otros, luego intente ser comprendido. Cuando usted tiene un problema con un docente, por ejemplo, una puntuación cuestionable, una extensión de fecha tope de asignación, póngase en el lugar del docente. Ahora pregúntese cómo podría argumentar mejor en dicha situación.
7.   Busque las mejores soluciones a los problemas. Por ejemplo, si usted no entiende un tema del curso, no relea simplemente el tema. ¡Intente alguna otra cosa! Consulte con el profesor, tutor, consejero académico, un compañero de clase, un grupo de estudio, o el Centro de habilidades de estudio de su escuela.
8.       Busque desafiarse continuamente a sí mismo.

Administración del tiempo.
1.   Pautas:
a.   Controle su tiempo.
b.   Reflexione sobre como gasta su tiempo.
c.   Sea consciente de cuando está desperdiciando su tiempo.
d.   Sepa cuando es productivo.
2.   ¿Cómo planear un efectivo cronograma de estudio?
a.   Concédase el suficiente tiempo para dormir, una dieta bien balanceada y actividades placenteras.
b.   Priorice las tareas asignadas respetando su cronograma sin volverse un “esclavo” de éste. Planee como utilizar las “horas muertas” con actividades que le permitan retomar fácilmente el estudio.
c.   Prepárese para dar la lección, responder el cuestionario del profesor o discutir con otros compañeros lo estudiado en la clase
d.   Al finalizar la asignatura repase lo aprendido en clase. El docente le dará guías para comprender mejor el temario.
e.   Recuerde: el olvido es mayor dentro de las 24 horas sin repaso.
f.    Elija para estudiar un lugar libre de distracciones.
g.   Cronograme un repaso semanal.

La concentración.
El arte o práctica de la concentración, no importa si se estudia biología o se aprende a jugar al billar, es eliminar la distracción y enfocarse sobre la tarea en cuestión. Si usted se da cuenta de que está leyendo un tema y de repente descubre que no tiene idea alguna acerca de lo que acaba de leer, o si asiste a clases y tiene dificultad en prestar atención a lo que se está diciendo, estos consejos pueden ayudarle:
1.   Adhiérase a una rutina, cronograme su tarea de estudiar para que ésta sea eficaz.
2.   Estudie en un ambiente callado.
3.   Para un descanso del estudio, haga algo distinto de lo que ha estado haciendo y en un lugar diferente (por ejemplo, dé una vuelta si ha estado sentado).
4.   Antes de las lecciones, examine los apuntes de las clases anteriores y lea el tema que pertenece a la clase del día, para que pueda anticiparse a las ideas principales que el profesor expone.
5.   Muéstrese durante las lecciones exteriormente interesado (expresión y postura de atención), pues esto motivará su interés interno.
6.   Resista a las distracciones ubicándose en la parte delantera de la sala de clase, alejado de compañeros que interrumpan y centrándose en el profesor por medio del escucharlo y tomar apuntes.

Lectura de material difícil.
1.   Lea el título y el primer párrafo. Si hay un resumen al final de un capítulo, léalo. Trate de captar cómo esta está organizado el tema. Si necesita más fundamento, busque otras fuentes.
2.   Busque las ideas principales. Busque títulos, encabezamientos, y subencabezamientos. Seleccione frases sobre el tema. Utilice gráficos, esquemas y diagramas. Tome apuntes mientras lee.
3.   Busque palabras cuyos significados son importantes para su comprensión del tema, pero que no puede discernir por el contexto.
4.   Controle su comprensión. Periódicamente deténgase y pregúntese a sí mismo, “¿Qué he aprendido?”. Conecte esto con lo que ya sabe.
5.   Relea. Si no entiende una idea, vuelva atrás y relea. Repita las ideas difíciles con sus propias palabras.
6.   Lea hasta el fin. No se desanime ni detenga la lectura. Las ideas pueden tornarse más claras cuanto más lea. Cuando termine de leer, repase para ver lo que ha aprendido, y relea aquellas ideas que no son claras.

Preparación de los exámenes.
Para realizar bien los exámenes primero debe usted aprender la materia, y luego repasarla antes del examen.
Estas son algunas técnicas para comprender mejor su materia:
1.   Aprender:
a.   Tome buenos apuntes en sus clases y de sus libros de texto.
b.   Repase sus apuntes luego de las clases, conferencias o lecciones.
c.   Repase brevemente los apuntes antes de la clase siguiente.
d.   Programe algún momento al fin de la semana para un repaso más extenso.
2.   Repasar:
a.   Tome buenos apuntes sobre lo que su profesor le indica que será incluido en el examen.
b.   Organice sus apuntes, libros, y tareas asignadas, de acuerdo a lo que se incluirá en el examen.
c.   Estime las horas que necesitará para repasar la materia
d.   Bosqueje un cronograma de “bloques” unitarios de tiempo y materia.
e.   Examínese a sí mismo sobre la materia.
f.    Finalice el estudio el día antes de examen.

Prever el contenido del examen.
1.   Preste particular atención a todas las guías de estudio que el profesor entrega antes del examen, o incluso al comienzo del curso. Por ejemplo: puntos clave, capítulos particulares o partes de capítulos, “fichas”, etc.
2.   Pregunte al profesor que puede adelantar sobre el examen, si este no brinda voluntariamente la información.
3.   Preste particular atención –sólo antes del examen- a los puntos que el profesor trae a discusión durante clases o lecciones.
4.   Elabore una lista de posibles preguntas que usted podría plantear si estuviera elaborando el examen, luego vea si puede responder a dichas preguntas.
5.   Revise exámenes anteriores ya evaluados por el profesor.
6.   Preste especial atención a las pistas que indiquen lo que el profesor podría examinar de una lección, como cuando dice:
a.   algo más de una vez,
b.   o escribe algo sobre el pizarrón,
c.   o hace una pausa para revisar notas,
d.   o hace preguntas a la clase.
e.   “!Esto estará en el examen!”

Revisión de recursos para los exámenes.
1.   Elabore Listas de Control para el estudio. Identifique todos los temas sobre los que será examinado. Haga una lista de apuntes, fórmulas, ideas y textos asignados que deberá explicar. Esta lista de control le permitirá dividir el temario general en “bloques” organizados y manejables, los cuales le posibilitarán un plan de revisión comprehensivo con un mínimo de ansiedad.
2.   Elabore apuntes de resumen y “mapas conceptuales”. Brevemente diseñe un plano o “mapa conceptuales” de las ideas importantes del curso y sus relaciones. Los apuntes de resúmenes deben visualizar listas y jerarquías de ideas. La creatividad y un cuadro visual le ayudarán a evocar estas ideas.
3.   Elabore fichas. para definiciones, fórmulas, o listas que necesitará tener memorizadas. Coloque temas sobre un lado de la ficha y respuestas sobre el otro. Las fichas le preemitirán evaluar su habilidad no sólo para reconocer la información importante, sino también para recuperar información desde el principio.

Cómo organizarse para rendir exámenes.
1.   Comience a repasar con anticipación. Esto le dará al cerebro tiempo para sentirse cómodo con la información y a usted seguridad.
2.   Realice períodos de repaso diarios cortos. Podrá realizar sesiones de repaso más intensas antes de los exámenes principales.
3.   Lea los temas a ser evaluados antes de asistir a las clases. Esto lo ayudará a identificar los conceptos que el profesor considera importantes y que de algún modo ya le resultan familiares.
4.   Repase sus apuntes inmediatamente después de las clases. Esto le servirá para identificar la información que no comprende mientras la lección aún está fresca en su memoria. Cuando repasa enseguida después de las clases, tiene tiempo de aclarar la información con otros estudiantes.
5.   Haga repasos en grupo. Esto le permitirá cubrir temas importantes que de otro modo se le pueden pasar por alto.
6.   Realice un repaso más amplio con la mayor anticipación, para poder tener un encuentro con el profesor durante los horarios en los que esté disponible para aclarar sus dudas.
7.   Divida el material de estudio en trozos pequeños, especialmente durante los repasos principales previos al examen. Estudiar tres horas a la mañana y tres horas a la tarde es más efectivo que estudiar en un solo tramo de seis horas seguidas. Estudiar mientras se está mentalmente fatigado es en general una pérdida de tiempo.
8.   Estudie el material más complejo cuando esté más atento.

Cómo manejar la ansiedad frente a un examen.
La mayoría de los estudiantes experimenta cierto nivel de ansiedad al rendir un examen. Cuando el nivel de ansiedad afecta el rendimiento se transforma en un problema.
1.   Preparación general generando confianza. Revea su situación personal y capacidades. Un consultor académico puede ayudarlo en este aspecto. Revea con él algunos de estos puntos:
a.   Cómo desarrollar buenas estrategias y hábitos de estudio.
b.   Cómo administrar el tiempo (cómo manejar la retrasos, distracciones, perezas, etc.).
c.   Organización del material de estudio. Construya de a poco una estrategia y no se sobrecargue.
d.   Como manejar las presiones externas. Las consecuencias del éxito/fracaso (calificaciones, graduación), presiones de los pares, competitividad, etc.
e.   Revea su rendimiento pasado en exámenes para mejorar y aprender de la experiencia.
2.   Preparación antes del examen para reducir la ansiedad:
a.   Acérquese al examen con confianza. Utilice cualquier estrategia que pueda para personalizar el éxito: visualización, pensamiento lógico, hablar consigo mismo, trabajo en equipo, llevar un diario, etc. Piense en el examen como una oportunidad para mostrar cuánto ha estudiado y recibir una recompensa por lo que ha estado haciendo.
b.   ¡Esté listo! Aprenda el material a fondo y organice qué otros materiales necesitará para el examen. Utilice una lista.
c.   Elija una ubicación cómoda para rendir el examen, con buena iluminación y distracciones mínimas.
d.   Dése mucho tiempo, especialmente para hacer las cosas que necesite antes del examen y llegue al lugar temprano.
e.   Evite pensar que tiene que abarrotarse justo antes de la evaluación.
f.    Esfuércese para conseguir un estado de concentración relajado. Evite hablar con compañeros que no estén bien preparados, que se expresen en forma negativa o que distraerán su preparación.
g.   Se dice que un programa de ejercicios agudiza la mente.
h.   Duerma bien la noche anterior al examen.
i.     No se presente al examen con el estómago vacío. Las frutas frescas y las verduras a menudo se recomiendan para reducir el stress. Entre las comidas que aumentan el stress se encuentran los alimentos procesados, edulcorantes artificiales, bebidas sin alcohol efervescentes, chocolate, huevos, alimentos fritos, comida “chatarra”, cerdo, carnes rojas, azúcar, productos con harina blanca, papas fritas y bocados similares, comidas que contengan conservantes o condimentos pesados.
j.    Coma liviano o algún alimento nutritivo para quitar la ansiedad de su mente. Evite todo lo que contenga alta cantidad de azúcar (dulces) que pueden agravar su condición.
3.   Durante el examen:
a.   Leer las instrucciones cuidadosamente y atienda las explicaciones del examinador apuntándolas en una “hoja borrador”.
b.   Controle el tiempo durante el examen.
c.   Cambie de posición para relajarse.
d.   Si su mente se pone en blanco intente realizar un esquema de la misma para utilizarla de guía posteriormente, o saltee la pregunta y continúe.
e.   Si la evaluación es un ensayo, y la mente se le pone en blanco con respecto a todo el examen, tome una pregunta y comience a escribir. Eso puede ayudar a disparar la respuesta en su cabeza.
f.    No entre en pánico cuando los demás estudiantes comienzan a entregar sus trabajos. No hay recompensa por entregar primero.
4.   Si se encuentras tenso y nervioso durante el examen:
a.   Relájese, usted tiene el control. Realice el siguiente ejercicio por lo menos 3 veces. En 4 tiempos aspire por la nariz y exhale por la boca en 4 tiempos, también.
b.   No piense en el temor. Haga una pausa: piense en el próximo paso y manténgase en la tarea, paso a paso.
c.   Permítase ver sus propios adelantos. Utilice refuerzos positivos para con usted mismo: reconozca lo que ha hecho, lo que está haciendo, lo mejor.
d.   Esté preparado para sentir algo de ansiedad. Es un recordatorio de que quiere hacer lo mejor y poner allí toda la energía, tan sólo manténgala manejable.
e.   Note que la ansiedad puede ser un “hábito” y que es cuestión de práctica utilizarla como una herramienta para tener éxito.
5.   Después del examen, repase mentalmente cómo lo hizo.
a.   Haga una lista de las cosas que dieron resultado y manténgase con esas estrategias. No importa cuan pequeños seas los ítems: están construyendo bloques para tener éxito.
b.   Haga una lista de lo que no dio resultado para mejorar.
c.   Celebre que esta en marcha para superar este obstáculo.
6.   ¡Busque centros cercanos y recursos en su escuela para pedir orientación! Si es conciente de que tiene un problema con la ansiedad frente a los exámenes, asegúrese de que su docente o instructor lo sepa con anterioridad a que comience cualquier situación de examen.

Diez consejos para los exámenes.
1.   Venga preparado; llegue temprano para los exámenes. Traiga todos los materiales que necesitará, tales como lápices, gomas, lapiceras (asegúrese de que funcionan a veces las lapiceras nuevas no funcionan correctamente), calculadora, diccionario y reloj.
2.   Esto le ayudará a tener todo a mano y concentrarse en la tarea. Permanezca relajado y confiado. Recuérdese a sí mismo que está bien preparado y va a salir todo bien. No se permita volverse ansioso; si se siente ansioso antes o durante un examen, realice varias respiraciones lentas y profundas para relajarse. No hable con otros “estudiantes negativos” antes de un examen; la ansiedad es contagiosa.
3.   Siéntase cómodo pero alerta. Escoja un buen sitio para realizar el examen. Asegúrese que usted tiene suficiente espacio para trabajar. Mantenga una postura erguida en su asiento.
4.   Haga una revisión previa del examen (si no es cronometrado). Utilice un 10% de su tiempo de lectura leyendo todo el examen cuidadosamente. Marque los términos clave y decida cómo administrar su tiempo. A medida que lee las preguntas, escriba breves apuntes indicando ideas que podrá utilizar más tarde en sus respuestas.
5.   Planee contestar las preguntas fáciles primero y las preguntas más difíciles en último lugar. Conteste las preguntas del examen en un orden estratégico:
a.   Empiece contestando las preguntas fáciles que ya sabe, luego aquéllas con valor puntaje más alto.
b.   Las últimas preguntas que responde deben ser las más difíciles.
c.   Recuerde utilizar una hoja de borrador para anotar los datos que se le vayan ocurriendo mientras escribe.
6.   Cuando realiza un examen “múltiple choice”, sepa cuándo conjeturar. Primero elimine las respuestas que sabe que son erróneas. Siempre conjeture cuando no hay sanción por hacerlo o se pueden eliminar opciones. No conjeture si no tiene ningún fundamento para su opción y si será sancionado por conjeturar. Si su primera opción es normalmente correcta, no cambie sus respuestas a menos que esté seguro de la corrección.
7.   Cuando realiza un examen “ensayo”, piense antes de escribir. Elabore un breve esquema para su ensayo apuntando unas pocas palabras para indicar las ideas desea discutir. Enumere estos ítems en su lista para indicar el orden en que los discutirá.
8.   Cuando escriba el examen “ensayo”, vaya directamente al punto. Afirme su punto principal en la primera frase. Use su primer párrafo para proporcionar una apreciación global de su ensayo. Use el resto de su ensayo para discutir estos puntos con más detalle. Apoye los puntos con información específica, ejemplos, o citas de sus lecturas y notas.
9.   Si el cuestionario parte de un texto o frase utilícela en su respuesta transcribiendo parte de ellas.
10.   Si le piden que compare elementos recuerde que no alcanzará con la enumeración de las características de los dos o más puntos a comparar. Su respuesta debe integrar continuamente las características iguales o diferentes.
11.   Reserve 10% de su tiempo de examen para la revisión. Repase su examen. Resista el impulso a salir tan pronto ha completado todos los ítems. Asegúrese de haber contestado todas las preguntas. Corrija su escrito en cuanto a deletreo, gramática y puntuación. Verifique sus respuestas en matemáticas para errores por descuido (por ejemplo, errores en los decimales). Compare sus actuales respuestas a los problemas de matemática con una rápida estimación.
12.   Analice los resultados del examen. Cada examen puede prepararlo para un próximo examen. Utilice sus exámenes para repasar cuando estudia exámenes finales.
13.   Decida acerca de qué estrategia de estudio funcionó mejor para usted y adóptela. Identifique aquéllas que no funcionaron bien y reemplácelas.

El estudio de autores y textos.
Al igual que otras formas de trabajo es obvio que conviene al estudiante contar con un medio adecuado (lugar iluminado, cómodo en general, etc.) y con horarios planificados y metas claras. No siempre suele ser así y el resultado es que “al terminar”, uno se encuentra sabiendo muy poco más que al comienzo.
Tal vez la técnica que señalaremos sirva para estudiar mejor un texto y por lo menos superar los problemas metodológicos principales.
Cuando el estudiante toma un libro historiográfico o documental, es conveniente que realice primero una aproximación rápida, tomando en cuenta los índices, los títulos y luego efectúe una primera lectura veloz. Así se consigue una idea general del tema y de “un tirón”, se conocen las partes fundamentales en que está tratado.
Entonces se estará en condiciones de ordenar las preguntas que fueron apareciendo y buscar los antecedentes. Siempre se recordará algo conocido anteriormente. Este es el momento de usar algunas herramientas de apoyo, como los diccionarios, las enciclopedias, atlas geográficos y textos que divulguen información, por ejemplo sobre el autor del documento, su época y los problemas sociales más importantes. Así, preguntándonos con calma sobre lo que nos dice el texto (manteniendo el libro cerrado), preparémonos para el análisis eligiendo un orden de lectura.
Elegido ya el orden de lectura, se tratará ahora de leer para aprender. Se analizará párrafo a párrafo, sin que escape nada. Aquí puede usarse el subrayado. Se hace más eficaz y breve el repaso; se trata sólo de resaltar,  siempre con lápiz, las ideas fundamentales de cada párrafo. Todo subrayado tendrá sentido por sí mismo. Será útil ir numerando cada párrafo.
Ya sin el texto y sin apuntes a la vista ha de tratarse la explicación de lo leído (inclusive en voz alta), siendo este un repaso muy revelador de lo comprendido y de lo que no se entendió (esto último debe retomarse directamente, repitiendo el método anterior hasta solucionar el problema). Finalmente ahora se podrá realizar una esquematización correcta, que destacando lo fundamental resulte explicativa. Se partiría de los títulos y subrayados. Sin un esquema (breve, ordenado), el estudio de un texto no estará terminado. Así se tendrá: un registro de las ideas de cada párrafo, de cada parte y de toda la obra. Y lo fundamental: HABRÁ UNA SÍNTESIS RIGUROSA DE LA CUAL PARTIR PARA LA TOMA DE POSICIÓN PERSONAL Y CRÍTICA DEL TEMA.

En síntesis, las etapas son:
1. EXPLORACIÓN;
2. BÚSQUEDA DE ANTECEDENTES;
3. ANÁLISIS DETALLADO;
4. REPASO;
5. ESQUEMATIZACIÓN.

Cronologías y “líneas de tiempo”.
Siempre es necesario en un análisis histórico poder sostener una clara y visible correlación de los hechos, pues esto permite acceder al estudio de los procesos y comprender la compleja red de relaciones causales. No se trata de hacer “el culto a la fecha”, ni pensar que “los hechos hablan por sí mismos”. Siempre se tratará de entender los procesos históricos en su globalidad, explicativamente, desentrañando así las líneas tendenciales de una formación social en desarrollo. De la misma manera en que construimos periodizaciones, también montamos cronologías y las representamos con gráficas, como las líneas de tiempo. Estos instrumentos son válidos para el estudio histórico si no se los concibe como verdades absolutas, dogmáticas, ni se pretende sustituir con ellos el estudio particular de los procesos sociales concretos.
En los programas de historia son especialmente útiles las cronologías las que fácilmente pueden ser representadas y esquematizadas.

Técnica del subrayado.
1.   Subrayar un texto facilita el estudio, mejora la atención y hace más corto y eficaz el reparto.
2.   El objetivo de rayar debajo de las ideas fundamentales es destacar y realzar los elementos más significativos del texto, sin que éste pierda sentido.
3.   Se subraya lo fundamental de un texto o tema sin el cual sería imposible su comprensión.
4.   Todo lo subrayado deberá tener sentido por sí mismo.
5.   Se debe subrayar siempre con lápiz. Lo ideal es realizarlo con un lápiz de color, el rojo para las principales y el azul para los datos que expliquen lo fundamental.
6.   Primero se lee todo el texto, comenzándose a subrayar después de la segunda lectura.
7.   Hay que subrayar párrafo por párrafo.
8.   En cada párrafo se encontrará por lo menos una idea fundamental que se subraya en rojo y otras ideas complementarias que se subrayan con azul.
9.   Las ideas a subrayar están normalmente al principio o al final del párrafo.
10.               No se debe estudiar nunca una lección sin haberla subrayado previamente.

Técnica del resumen.
1.   La labor de resumir es posterior a la de subrayar.
2.   El resumen es un conjunto de ideas expresadas con frases coherentes.
3.   Resumir implica escribir con palabras del estudiante lo primordial de un texto. Un primer paso para lograr este objetivo es usar las palabras subrayadas relacionándolas con términos conectivos para formar frases o conectar frases subrayadas. Una segunda etapa es usar sinónimos.
4.   Todas las ideas del resumen deben estar perfectamente integradas.
5.   En el resumen hay que ir de lo general a lo particular. De lo fundamental a lo explicativo.
6.   Se debe usar la brevedad, pero con precisión. Un resumen debe huir de los detalles sin importancia, pero debe tener los datos necesarios que aseguren una información perfecta.
7.   Su extensión debe ser aproximadamente del 25% del texto primitivo.
8.   La presentación del resumen debe recordar un texto normal. Su desarrollo es horizontal.
9.   En los resúmenes no podrán aparecer guiones o asteriscos. El punto y seguido es el medio de enlace.
10.   El resumen debe tener unidad y sentido; todas las ideas contenidas en él deben supeditarse al conjunto. Un resumen no puede ser una colección de ideas, una simple enumeración.
11.   El resumen facilita la comprensión y ayuda al repaso de los textos.

Para analizar del esquema.
1.   Un esquema es la expresión gráfica de las ideas importantes de una lección.
2.   En el resumen se utilizan frases con sentido completo. En el esquema importan las ideas, que pueden ser representadas con palabras o signos.
3.   Se utiliza un lenguaje sintetizado del tipo “telegráfico”.
4.   Los elementos fundamentales del esquema son: el título, los apartados y las ideas que explican cada apartado.
5.   Un esquema deberá contener nuestras propias palabras.
6.   Cada idea deberá expresarse en un renglón, y llevará delante un guión o número distintivo.
7.   Según la asignatura y gusto personal se puede usar la forma de rama, de apartado lineal, de globo, etc. No se deben usar llaves.
8.   Se utilizan signos de realce, subrayado, escritura de distintos tamaños o formas de letras para destacar algún elemento de importancia.
9.   En el esquema deber predominar lo blanco del papel sobre lo escrito.
10.   Realizarlo luego del resumen o de leer el texto por lo menos dos veces.
11.   Estudiar es sinónimo de preparar y confeccionar un esquema.
12.   Acostúmbrate a esquematizar todo aquello que estudies o leas.

Técnica de la síntesis.
1.   El trabajo de síntesis sólo puede hacerse después del esquema o de una actividad similar, luego de varias lecturas y subrayados.
2.   Puede hacerse sobre la base del esquema, redactando las ideas principales.
3.   Requiere una lectura profunda y la ampliación de información para formar el propio juicio del estudiante.
4.   En la síntesis se debe poner lo que se comprendió del texto en un juicio breve y conciso pero completo.
5.   La síntesis de un texto extenso debe contener las ideas y detalles más importantes, las definiciones y lo términos técnicos.
6.   Es un trabajo de elaboración personal en el que se incorporan reflexiones y expresiones propias.


Mapas Conceptuales. (Concept mapping)
Muchos de nosotros hemos aprendido a esquematizar la información en nuestros estudios, como sigue:
        I.      Primer ítem
     II.      Segundo ítem
a.       sub ítem
b.       sub ítem
                                                         i.      sub sub ítem
                                                       ii.      sub sub ítem
   III.      Tercer ítem

Las alternativas a este esquema son el Mapa Conceptual y Mental.

¿Por qué un ‘mapa’?
Esquematizar es lineal y organizado, pero no es la manera en que trabajan nuestras mentes. En lugar de ello, nuestras mentes trabajan como los sitios web: grupos de páginas, o ideas, o conceptos se unen conjuntamente o incluso salen fuera de sí mismos y se unen a otras agrupaciones o redes.
El aprendizaje combina lo que usted ya sabe con lo que desea saber, y vincula esta nueva información dentro de nuestro “depósito” de conocimientos. Nuestra memoria luego procesa estos nuevos “eslabones” y asociaciones para su posterior evocación. Un mapa mental se enfoca en una idea; un mapa conceptual trabaja con varias o muchas.

¿Cuándo hacer el mapa?
Para organizar un tema
·      Lograr un aprendizaje más profundo.
·      Integrar viejo y nuevo conocimiento.
·      Repasar y prepararse para exámenes.

Tomar apuntes
·      Ubicar nuevas ideas en una estructura.
·      Torbellino de ideas (brainstorming).

Comunicar ideas complejas
Use los Mapas para poner las cosas en perspectiva, analizar relaciones, y priorizar.

¿Cómo se hacen los Mapas?
·      Primero rechace la idea de un esquema, o de párrafos con oraciones.
·      Luego, piense en términos de palabras clave o símbolos que representan ideas y palabras.

Usted necesitará:
·      Un lápiz (¡tendrá que borrar!) y una hoja grande de papel en blanco (no rayado) o
·      una pizarra y tizas (de colores) y
·      notas “adhesivas” (Post-it).
Escriba la palabra o frase breve o símbolo más importante, en el centro reflexione sobre la misma; rodéela con un círculo.
Ubique otras palabras importantes fuera del círculo. Dibuje círculos sobrepuestos para conectar ítem, o use flechas para conectarlos (piense en los ‘links’ de las páginas de un sitio web).

Deje espacio en blanco para desarrollar su mapa debido a:
·      Posteriores desarrollos.
·      Posteriores explicaciones.
·      Interacciones entre ítem.
·      Trabaje en forma rápida sin detenerse a analizar su trabajo.
·      Revise y corrija esta primera fase.

Piense en la relación de ítems externos hacia ítems del centro.
·      Borre, reemplace y acorte las palabras para esas ideas clave.
·      Reubique ítems importantes más cerca uno de otro para su mejor organización.
·      Si es posible, use color para organizar la información.
·      Una conceptos a palabras para clarificar la relación.

Continúe trabajando por el exterior
·      Libremente y en forma rápida agregue otras palabras e ideas clave (¡siempre puede borrar!).
·      Piense fantástico: combine conceptos para expandir su mapa; rompa los límites.
·      Desarrolle en las direcciones que el tema lo lleva. No se limite por cómo usted está haciendo el mapa.
·      A medida que expande el mapa, usted tenderá a volverse más específico o detallado.

Haga el mapa a un lado
·      Mas tarde, continúe desarrollando y revisando.
·      Deténgase y piense acerca de las relaciones que está desarrollando.
·      Expanda su mapa en el tiempo (¡hasta el momento de un examen, si es necesario!).
Este mapa es su documento personal de aprendizaje combina lo que usted conocía con lo que está aprendiendo y lo que puede necesitar para completar su “cuadro”.

Para estudiar un tema.
1.   Leer los datos de libro: título, autor, fecha, lugar de edición, índice y prólogo.
2.   Lograr una visión de conjunto: título, subtítulos, láminas, mapas, gráficas, etc.
3.   Leer con atención: cada párrafo subrayando la idea principal.
4.   Recapitular y sintetizar lo leído, reestructurándolo en resúmenes o esquemas.

Para analizar un texto.
1.   Leer los datos que acompañan el texto: título, datos del autor, tiempo y espacio dónde fue escrito.
2.   Leer el texto subrayando las ideas más importantes de cada párrafo.
3.   Analizarlo teniendo en cuenta quién lo escribió, por qué lo hizo, qué información e interpretación aporta.

Para analizar un mapa histórico.
El mapa histórico es la representación espacial de los acontecimientos históricos que sucedieron en un tiempo en un espacio determinando: descubrimientos, guerras, revoluciones, etc. Para analizarlo debes:
1.   Leer el título para saber cual es el tema representado.
2.   Leer las referencias para interpretar correctamente los colores, las líneas, las figuras, etc.
3.   Comentar en qué situación se encuentran y como están relacionados, en esa fecha histórica, los elementos que intervienen en el mapa.

Para analizar una línea de tiempo.
1.   Identificar la periodización utilizada (milenios, siglos, años, etc.)
2.   Identificar que época o épocas históricas están representadas.
3.   Ubicar en la línea de tiempo el tema que se esta estudiando, y relacionarlo con los sucesos anteriores y posteriores al mismo.

Para analizar una gráfica.
Las gráficas más usuales son de líneas, barras o circulares.
Deben de leerse en forma ordenada:
1.   Título: presenta el tema y los datos que relaciona.
2.   Coordenadas: leer los datos de la coordenada vertical (eje “y”) y de la horizontal (eje “x”).
3.   Variables: observar cómo se relacionan los distintos elementos de la gráfica.

Para analizar una pintura.
1.   Ubicar la obra en el tiempo, espacio y contexto histórico.
2.   Identificar el tema representado, que generalmente se manifiesta en el título.
3.   Describir sus elementos, que son:
a.   el color: pueden ser variados o escasos, fuertes o suaves, cálidos o fríos, planos o sombreados, etc.
b.   el dibujo: es la línea que separa una mancha de color de otra. Puede estar muy marcada o no estar señalada en absoluto. El trazo puede ser fuete, suelto, energético, vigoroso, suave.
c.   la luz: puede ser difuso o concentrada en un punto, la calidad de la luz puede ser intensa, difusa o concentrada, tenue, hiriente, contrastada.
d.   la perspectiva: consiste en lograr la apariencia de la tercera dimensión. Un cuadro puede tener presencia o ausencia de profundidad, punto de vista alto, medio o bajo, reducción geométrica, etc.
e.   la composición: es la distribución de los objetos o personas por la superficie del cuadro y la relación entre ellos. Puede tener abundancia o escasez de personajes y objetos: recargamiento de figuras o sencillez, relación de los elementos entre sí, etc.
f.    el fondo: valorar la integración del fondo en el cuadro, capacidad expresiva del fondo, etc.
g.   el tratamiento del tema: es la concepción personal que cada artista tiene del motivo de su obra. Tener en cuenta la originalidad, sentimiento de fuerza, ternura, seriedad, simpatía, expresividad de los rostros, etc.

Para analizar una obra arquitectónica.
1.   Ubicar la obra en el tiempo, espacio y contexto histórico.
2.   Describir sus elementos, que son:
a.   Los elementos esenciales: los soportes o elementos sustentantes (muros, pilares, columnas, arcos) y las cubiertas o elementos sustentados (techos, bóvedas, cúpulas).
b.   Los elementos decorativos que dependen del estilo arquitectónico.
Para analizar una escultura.
1.   Ubicar la obra en el tiempo, espacio y contexto histórico.
2.   Clasificarla en escultura de relieve o de “bulto redondo”. En el relieve: se llaman altorrelieves cuando sobresalen más y bajorrelieves cuando sobresalen menos. La escultura de bulto redondo se caracteriza por ser tridimensional y presentar múltiples puntos de vista.
3.   Describir su forma, expresión, colores, etc.

Para analizar caricaturas y carteles.
1.   Ubicar la obra en el tiempo, espacio y contexto histórico.
2.   Identificar los elementos:
a.   La caricatura es una composición, generalmente de personas y de cosas, que representa, cada una, algo en particular, que busca trasmitir una situación o idea; y ésta se muestra generalmente a través de la exageración de determinados rasgos físicos, de vestimentas, acciones o actitudes.
b.   El cartel utiliza símbolos, gestos, actitudes, y diferentes tipos de letras.
3.   Deducir la intención con que fueron creados, porque lo que buscan es captar la atención, para hacer participar o reflexionar sobre una idea, crear necesidades, sentimientos, etc.

Para analizar un diario o revista.
La prensa tiene como objetivo la información, la interpretación y el comentario de los acontecimientos socialmente relevantes. La noticia es la materia prima del trabajo periodístico, que se concreta en dos productos: el relato y el comentario. El relato, para la transmisión de los hechos que se consideran de interés para el público. El comentario para la expresión de ideas, juicios, pensamientos, etc. El hecho es un dato objetivo, en tanto el comentario es un producto subjetivo. Esta pluralidad de opiniones debe considerarse como estímulo para la reflexión, el análisis crítico y la toma de posición.
El discurso periodístico tiene una sencilla estructura convencional: unos titulares seguidos de un copete, a modo de introducción o resumen y el cuerpo de la historia. Estas tres partes se reconocen directamente por la diferencia de caracteres tipográficos, de tipo de letra o número de columnas de la composición. Los titulares recogen la información más importante. El copete proporciona un breve resumen de los acontecimientos, especificando lugar, hora, circunstancias, expresados en pocas frases. En el cuerpo de la historia encontramos un desarrollo suficiente de los hechos que dan origen al relato; la explicación de los antecedentes del asunto y de las circunstancias actuales que documentan el acontecimiento; una exposición de las reacciones e interpretaciones que los expertos hacen del uso del asunto noticioso y la realización de un análisis valorativo o previsión de las expectativas; a modo de una conclusión o comentario objetivo del acontecimiento que ha puesto en marcha el proceso creador de todo el relato.

CUANDO SE ESTÁ EN LA CLASE.

Técnica de los apuntas en clase.

Suele confundirse el sentido real de esta técnica. No se trata de anotar las palabras del profesor, del expositor, o incluso de un texto, sino de recoger fielmente sus ideas. Se valora así la calidad y no la cantidad de los apuntes. Los apuntes son una herramienta, no una actividad para coleccionistas o “acumuladores”. Es sabido que su práctica mejora notablemente si ya se sabe previamente algo del tema tratado; son totalmente ineficaces si no se entiende lo que se va escribiendo. Su uso correcto en clase permite que quien los utiliza pueda participar activamente (así tiene tiempo de pensar y de preguntar lo que no entiende), y a su vez conservar lo fundamental del tema para su estudio posterior.

Recordemos que es fundamental el uso de títulos y subtítulos, para ordenarlos, para destacar las partes del tema que va siendo tratado.


SACAR APUNTES
supone:
OIR - INTERPRETAR - SINTETIZAR,
para luego poder
ESTUDIAR.



Material confeccionado modificando documentos originales extraídos de:
-      Trabajo creado por profesores del Liceo 17.
http://www.studygs.net/espanol/metacog.htm


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